domingo, 13 de abril de 2008

Maligno Moure


“¿Yooooooo? Es que... mmmmm... ese me dijo... “ Con estos argumentos se defendió el presidente de la Fundación San Rosendo, el sacerdote Benigno Moure, el pasado 2 de abril en la Audiencia Provincial de Ourense. El padre Benigno tuvo que declarar ante el juez por delito continuado de apropiación indebida, estafa y falsedad en documento público y privado, y le siguió el segundo imputado, el notario de Ourense Alejo Calatayud tras la denuncia del sobrino de una anciana ingresada en un geriátrico de la Fundación San Rosendo, que los acusó de traspasar a esta institución casi 600.000 € de las cuentas bancarias de su tía y unas 60 propiedades.

El cura y el notario en el banquillo de los acusados. Se trata sin duda de una conspiración comunista!

El Imperio

Benigno Moure es “el Amo”de la Fundación San Rosendo. Esta entidad “sin ánimo de lucro” cuenta con centros geriátricos para válidos, residencias asistidas, centros para discapacitados, especializados, mixtos, etc. En total 54 centros asistenciales distribuidos por toda Galicia. Además cuenta con 4 hoteles y 3 balnearios del Grupo Caldaria, administrados únicamente por el clérigo de desafortunado nombre. La Fundación recibe cuantiosas subvenciones públicas, donaciones privadas a tutiplén, conciertos de plazas de la Xunta y este año cuenta con un presupuesto de 43 millones... ¡¡de euros!!. El hecho de ser una institución benéfico-asistencial dedicada a la lucha contra la pobreza y la marginación (según su página web) no le ha impedido demostrar también gran habilidad en el campo de la especulación urbanística. Desde luego, gracias a la Fundación, Moure y sus adláteres no pasan hambre.


“Yo no robé nada, fue una cesión”

En 1998 María Vázquez ingresó en la residencia Os Gozos, perteneciente a la Fundación San Rosendo, en Pereiro de Aguiar. Entonces ya fue diagnosticada por los médicos de la institución con una “alteración de memoria y razonamiento, junto a demencia senil incipiente”. Después de otro examen en 2001 el forense escribió: “La informada no puede realizar los actos propios de su autogobierno y del gobierno de sus bienes”. Y en julio de ese mismo año el juez declaró incapacitada a la anciana. Fue entonces cuando el padre Benigno, sin poder soportar la tentación, hizo caso omiso del 7º mandamiento y organizó el teatrillo para hacerse con el patrimonio de María.
Moure tiene la conciencia tranquila y sigue afirmando que María “estaba en perfecto estado y lo donó todo voluntariamente”. Según la declaración del notario Alejo Calatayud, “la anciana movía la cabeza para asentir en respuesta a mis preguntas, por lo que a mi parecer ella entendía lo que le estaba diciendo”. Finalmente, a pesar de la silla de ruedas, la demencia senil, el parkinson, la artrosis, y con la ayuda de dos cuidadoras de la residencia, consiguieron estampar la huella digital de la anciana en el documento que hacía a Benigno Moure “dueño y titular de las cuentas”.


El despistado

Al por entonces director de la sucursal de Banesto en O Carballiño, José Luis de la Iglesia Santos, “no le llamó la atención” que Benigno Moure traspasase en dos días 451.000 euros de las cuentas de la mujer a otra de la Fundación. Este hombre, que estuvo presente en la firma de los documentos de las autorizaciones, declaró que la señora” afirmaba con la cabeza, aunque en ningún momento habló de donar nada”. A su vez, sí explicó que las correcciones visibles en los papeles bancarios habían sido hechas por él, “ya que me equivoqué en algunos números. Por norma general, en estos casos rompo el papel y hago otro, pero como los cubrí en el banco y estaban firmados ya por María Vázquez, los corregí para no tener que volver al geriátrico a firmar otros”.
Si ustedes siguen creyendo en la justicia institucional sepan que este individuo declaró como testigo y no como imputado.


Los Hermanos Marx en el juzgado

El señor banquero no fue el único desfachatado del proceso. Aquí van algunas de las declaraciones que se oyeron el 2 y 3 de abril en la Audiencia Provincial de Ourense.
- El notario imputado: “Doy fe de lo que me cuentan, no de la veracidad de lo que me cuentan”.(El País, ed. Galicia, 03/04/2008, p.3)
- El posterior comprador de las propiedades: “No me extrañó que la Fundación hiciese el trato, a pesar de que en la escritura que firmé para la compra estuviese María Vázquez como propietaria”. (faro de vigo. 03/04/2008)
- Benigno Moure: “Los pisos, las fincas y el dinero de las cuentas de María fueron traspasados a la Fundación, pero yo no me quedé con nada”. (El País, ed. Galicia, 03/04/2008, p.3)
- Benigno Moure: “Siempre hice las cosas a través del banco y a través de los directores del banco, de los que tengo que fiarme”. (Canarias 7. 02/04/2008)
- Benigno Moure: “Estoy muy tranquilo. Siempre se hizo la voluntad de la señora. Me puso como titular de sus cuentas por si hacía falta algo, pero ella seguía en la cuenta igual”. (faro de vigo. 03/04/2008)


La sentencia


Sólo queda que el juez dicte sentencia sobre el cura, el notario y, lo que más preocupa a acusados y acusadores, la herencia de la señora María. No se hagan muchas ilusiones. El padre benigno es un tirano ‘de prestigio’. El típico illuminati regional agente del Octogonus, un dinosaurio neofeudal con amigos en el oscuro submundo de los pistoleros. ¿Quién les dice a ustedes que el juez encargado de este caso es menos despistado que el notario o el banquero? La casa es grande, y donde comen dos comen tres. Fíjense en el poder que tiene este hombre que, en 1990, un centenar de trabajadores y el secretario de la CIG en Ourense, Etelvino Blanco, lo demandaron por malos tratos a los residentes de sus geriátricos y el juzgado orensano no sólo no admitió a trámite la denuncia sino que acabó condenado el sindicalista a prisión y al pago de un millón de pesetas.
De todas maneras estaremos pendientes de la Audiencia provincial.

Por nuestra parte declaramos:


Culpable a María Vázquez por acumular tanto patrimonio.
Culpable al sobrino acusador de María Vázquez por miserable aprovechado que sólo se preocupó por la herencia y nunca de su tía.
Culpable al notario, al banquero y otros parásitos, cómplices del régimen de terror de Moure.
Culpable al maligno Moure por practicar el fascismo en unas tierras tan bellas, por ladrón, por tirano con alzacuellos, por explotador, por peligroso y por exigir a sus siervos ir arreglados decorosamente e ir a misa cada vez que visita una de sus residencias, mientras el bellaco se lucra hasta el infinito con ‘la lucha contra la pobreza’ y con el negocio de la dependencia.